Este libro me ha aburrido hasta lo indecible. Y a pesar de eso le he dado un tres. Quizás no fuera exactamente aburrimiento, porque he conseguido acabarlo, más bien es algo que roza la apatía. El libro estaba allí, me miraba, pero no me interesaba cogerlo para seguir leyéndolo. Llevo como unas tres semanas con el libro, y eso no es normal en mi, bueno, es normal cuando me pasan cosas como esta, que no me atrae pero que me lo quiero terminar.
Ari estudia en casa, su padre le da clases todos los días y así pasa su vida. Un día, el ama de llaves la lleva con su familia, para que salga de la casa, porque esta muy sola, y Ari se hace amiga de Katleen, la hija del ama de llaves que tiene su misma edad, incluso llega a tener una cita con Michael, otro de los hijos y hermano de su amiga. Sin embargo, la desaparición de su madre al poco de nacer ella sigue atormentandole, y decide preguntar a su padre sobre el tema. Poco a poco irá averiguando cosas de su familia que no esperaba.
Toda la primera parte es insufrible, el día a día de Ari, contado por ella misma es ABURRIDO, con mayúsculas. Cuando su amiga entra en juego se hace algo más interesante, pero aún así, hasta la última parte (atención, pequeño spoiler), cuando decide irse a buscar la verdad sobre su madre no ha llegado a interesarme la historia (fin del spoiler).
Ari no me cae bien, y yo creo que en general ninguno de los personajes llega a caerme bien. No es culpa suya, son personajes normales y corrientes, pero a mi no me llaman. Y además he ido adivinando lo que va a pasar en cada paso de la historia. Eso normalmente no me importa, me gusta, incluso, poder hacerlo, pero aquí me ha cansado.
Esta saga de "vampiros éticos" tiene más libros y no sé si me atraerán los suficiente como para leerlos. Tengo muchos más en la lista como para elegirlos.
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